EL ESTILO GÓTICO
El arte gótico tiene su origen en Francia durante el s. XII. Las características principales en su arquitectura son el arco apuntado, la bóveda de crucerías o nervada y los amplios ventanales con vitrales. Suelen ser edificios con gran altura que, para mayor solidés, son reforzados con arcos exteriores llamados contrafuertes, exteriormente las cúpulas y torres suelen ser rematadas con pináculos y agujas dando una perspectiva de mayor altura. La arquitectura gótica tiene como esencia una fuerza ascendente y vertical, como si fuera jalado al cielo, mostrando así la esencia de la espiritualidad cristiana que se orienta hacia Dios.
LA TORRE
Las torres en los templos tienen distintas funciones: práctica cuando se usan como campanario o como ubicación urbana; simbólica cuando nos remiten a la grandeza y a la belleza de Dios. Las torres góticas, por su arquitectura, privilegia la función simbólica, ya que en su búsqueda de altura nos remiten a la trascendencia y sublimidad de Dios.
Nuestra Parroquia cuenta con una torre central en la que se ubica la imagen de Nuestra Señora de Fátima, los rosetones y las celosías, circundada por cuatro pináculos y dos torreones menores. De manera sobria y humilde refleja esa arquitectura que obliga a mirar hacia el cielo, trasladando nuestro pensamiento a lo divino.
Los trabajos de construcción de la torre van desde 1989 a 1998. La torre central alcanza una altura de 52 mts. desde el nivel de la puerta principal hasta la cruz, y de 56 mts. desde la calle. Tiene cinco niveles o cuerpos, en el primero, de abajo hacia arriba, está el pórtico en arco apuntado con arquivoltas y adornado con gablete hacia el exterior y un vitral hacia el interior; en el segundo nivel tenemos la imagen de Nuestra Señora de Fátima como centro de toda la vista frontal, manifestando así su patronazgo; en el tercer nivel encontramos cuatro rosetones, que son ventanas circulares caladas, parte esencial de la arquitectura gótica, que como característica particular en nuestra templo se encuentran en la torre sin dar hacia el interior del templo, como habitualmente sucede; en el cuarto nivel encontramos las celosías, también características del estilo gótico; finalmente, en el quinto nivel tenemos la aguja gótica adornada con crochet o cardinas, circundada por cuatro pináculos y coronada por la cruz, es ésta la que le da al templo una perspectiva de altura mayor y que genera esa sensación de ascensión a toda la estructura.
LOS VITRALES
El uso de vitrales en los templos es anterior a la arquitectura gótica, pero es en ésta en la que adquiere un gran valor simbólico, pues los vitrales son los nuevos lienzos donde se representa los pasajes bíblicos, la vida de Jesús y de los santos, son una catequesis luminosa y atrayente para todos. Privilegiar la luz, en el estilo gótico, tiene como fundamento la idea de que las cosas terrenas tienen la capacidad de elevarnos a las divinas, entre las cuales la luz ocupa un lugar central, pues por ella podemos ver las cosas creadas, por tanto, la luz es la creación que con mayor claridad nos puede mostrar la belleza de lo divino pues nos permite contemplar la belleza de lo creado.
Nuestra Parroquia cuenta con 33 vitrales que dan hacia el interior del templo. El proyecto es tener una catequesis mariana y cristológica. Vamos a descubrirlos iniciando por la entrada principal donde encontramos el complejo de tres rosetones con un vitral especial: en el rosetón superior se encuentra el rostro de Cristo rodeado por los apóstoles, en el rosetón izquierdo los símbolos de los siete dones del Espíritu Santo y en el derecho los símbolos de los siete sacramentos.
En los seis vitrales que están en la parte baja del templo en las naves laterales se han puesto las escenas de las seis apariciones de Nuestra Señora en Fátima a los tres pastorcitos:
Primera aparición el 13 de mayo de 1917 En esta aparición la Virgen les pide que vuelvan el día 13 de cada mes al mediodía para encontrarse con ella y los invita a rezar el rosario por la paz del mundo.
Segunda aparición el 13 de junio de 1917 Les invita a propagar la devoción al Inmaculado Corazón de María.
Tercera aparición 13 de julio de 1917 Comparte con ellos el llamado "Secreto de Fátima" dividido en tres partes. Les muestra el infierno. Y les enseña la oración: "Oh mi buen Jesús, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno. Lleva a todas las almas al cielo, especialmente a las más necesitadas de tu Divina Misericordia".
Cuarta aparición 19 de Agosto de 1917 La aparición no se dio el 13 de agosto porque los niños fueron retenidos por la alcaldía de su pueblo. La aparición sucedió días después, la virgen les pidió rezar más y hacer sacrificios por la salvación de los pecadores.
Quinta aparición el 13 de septiembre de 1917 A través de los pastorcitos, invita a todas las personas a presenciar un gran milagro el 13 de octubre.
Sexta y última aparición el 13 de Octubre de 1917 Se dice que más de 70 mil espectadores presenciaron luego de una intensa lluvia, “El Milagro del Sol”.
La invitación al rezo del rosario pertenece al núcleo del acontecimiento de Fátima. La Virgen María pide a los niños que recen el Rosario todos los días por la paz del mundo. Por eso en nuestra Parroquia están representados los misterios del santo Rosario como una manera de meditarlos y difundir su oración. En la parte superior, en los vanos del cuerpo de la nave se han representado los misterios Gozosos (hacia la izquierda) y los Gloriosos (hacia la derecha).
Los misterios Dolorosos están representados en la Cúpula. Cabe señalar que los misterios Luminosos están ausentes en los vitrales porque estos fueron incorporados posteriormente al rosario por el Papa Juan Pablo II en el año 2002, tiempo en el que los vitrales ya estaban elaborados. En los vitrales restantes de la cúpula se representa a Cristo rey, al centro, y en los dos restantes está la corte celestial.
En el crucero vemos la última serie de vitrales. En la parte posterior del crucero tenemos a los santos apóstoles Pedro (izquierda) y Pablo (derecha), en seguida en los extremos del crucero tenemos a los santos arcángeles Gabriel (izquierda) y Miguel (derecha), en seguida en la parte frontal del crucero a los evangelista san Lucas (izquierda) y san Juan (derecha), finalmente en la parte superior del presbiterio los vitrales de los evangelistas san Marcos (izquierda) y san Mateo (derecha).
Exteriormente, en la torre hay dos vitrales gemelos donde se representa a Jacinta, Francisco y Lucia contemplando a la Virgen de Fátima. Por último, en los torreones, pequeños y sencillos vitrales que representan distintos pasajes y milagros del Evangelio.
LAS ESCULTURAS
Altar
El altar representa a Cristo que se ofreció en la Cruz para nuestra salvación, es el centro de la acción de gracias que se consuma en la Eucaristía. Por su carácter y valor sagrado el altar debe ser muy digno. El altar de nuestro templo parroquial es de gran belleza, en su relieve hay tres lápidas: en la del centro se representa la resurrección del Señor, fundamento de nuestra fe; en la lápida del lado izquierdo se representa la ascensión del Señor a los cielos, Cristo haciende entre nubes y ángeles, mientras los varones de Galilea lo ven elevarse; en la lápida del lado derechos se representa la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles el día de Pentecostés, hecho fundante de la Iglesia.
Ambón
El ambón representa a Cristo resucitado, proclamación central del Evangelio. Además la dignidad de la Palabra de Dios requiere un lugar digno desde donde sea proclamada. El ambón de nuestro templo parroquial destaca por la belleza de su relieve labrado, el cual guarda armonía con el del altar. Tiene cuatro lápidas labradas en las que se representa a cada uno de los evangelistas con su alegoría: San Mateo con la figura de un hombre alado o ángel, pues comienza con la genealogía de Jesús, el hijo del hombre; san Marcos con la figura de un león, pues comienza con la predicación de san Juan Bautista, voz que clama en el desierto como el rugido de un león; san Lucas con la figura de un toro, pues comienza con el relato del sacrificio de Zacarías, y el toro era la ofrenda sacrificial por excelencia; y por último, san Juan con la figura de un águila, pues su evangelio es el más elevado teológicamente, el águila representa la elevación espiritual.
Pila bautismal
El signo sacramental del Bautismo es introducir dentro del agua o inmersión (en griego baptizo), este gesto de sumergir o lavar en el agua nos recuerda que somos purificados del pecado, a la vez la inmersión hace alusión a nacer, el bautismo es nuevo nacimiento, somos regenerados como hijos de Dios. La pila bautismal o fuente bautismal, que sirve como recipiente para el agua bendita, es uno de los elementos centrales del templo.
La pila bautismal de nuestra Parroquia tiene en la base bellos relieves de la Santísima Trinidad, origen de la gracia Bautismal; de San Juan Bautista, que con su bautismo de conversión prefigura el sacramento del Bautismo; y de los cuatro Evangelistas que anuncia el Bautismo de Cristo y de la Iglesia.
Sagrario
El sagrario o tabernáculo es un pequeño recinto donde se reserva el Santísimo Sacramento. Es el corazón vivo del templo, pues en él se encuentra presente real y verdaderamente Jesucristo, nuestro Señor. El sagrario tiene que ser lo primero que debemos de buscar al entrar en un templo católico para saludar a nuestro Señor con una reverencia, genuflexión o un momento de oración.
El Sagrario de nuestra Parroquia, labrado en cantera, tiene la forma de una Iglesia, recordándonos que la Iglesia vive la Eucaristía.
Via Crucis
Nuestro Señor Jesucristo concluye su vida terrenal exclamando en la cruz: “consummatum est”, “está cumplido”. Es en la Cruz donde alcanza plenitud la vida de nuestro señor Jesucristo, y también la de todo hombre, pues es en ella donde se resuelve la salvación.
Con la oración del Via Crucis nos detenemos a contemplar y meditar con mayor intensidad el misterio de la Cruz, pues nuestra mirada, con frecuencia distraída por intereses superficiales no nos permite descubrir la hondura del amor que tiene Dios por nosotros y que se nos ha manifestado en la Cruz. La finalidad del Via Crucis es que abramos el corazón al misterio del amor sin límites, que es también misterio de dolor. En las diferentes estaciones del Via Crucis descubrimos como Dios nos libera del mal, abrazando la cruz abraza al mundo y lo redime. La cruz es la respuesta de Dios al mal: Dar la vida.
Las imágenes del Via Crucis de nuestra Parroquia siguen con armonía el trabajo en cantera. Las lápidas de las estaciones, hechas con detalle, nos muestran con viveza el camino de la Cruz, dando así un bello testimonio de la entrega de nuestro señor Jesucristo. Al rezar el Via Crucis descubrimos que no somos espectadores, sino beneficiarios y colaboradores del amor de Dios.
Las imágenes sagradas
Las imágenes sagradas tienen como finalidad ayudarnos a contemplar a Dios. “La iconografía cristiana trascribe a través de la imagen el mensaje del evangelio que la sagrada Escritura trasmite mediante la palabra…” (CEC 1160). Todos los signos de la celebración litúrgica hacen referencia a Cristo; también las imágenes sagradas de la Santísima Madre de Dios y de los santos. Significan, en efecto, a Cristo que es glorificado en ellos… (CEC 1161).
En el interior del templo tenemos siete imágenes: En la parte más alta del retablo, tenemos la imagen de Cristo crucificado, pues es el misterio de la muerte y resurrección de nuestro Jesucristo el centro de la celebración litúrgica la Iglesia.
En el mismo retablo, en el centro, tenemos la imagen de nuestra patrona, imagen única y antigua, la cual no fue originalmente realizada para la advocación de Fátima; según el testimonio, es una imagen que inicialmente representaba el misterio de la Inmaculada Concepción y que fue donada al templo para ser ataviada bajo la advocación de Fátima. En la parte baja, al costado derecho del presbiterio tenemos la imagen propia de nuestra señora de Fátima, réplica de la original que se venera en Fátima Portugal, traída de Portugal en julio de 1990. Esta imagen fue bendecida por san Juan Pablo II en el Vaticano y coronada en nuestra Parroquia por el Señor Obispo Don Javier Lozano Barragán.
Dentro del templo, en los cruceros, también hay algunas imágenes. Del lado izquierdo tenemos las imágenes de san José, colocada en el nicho, y santa Eduviges, colocada sobre un pedestal; del lado derecho tenemos la imagen nuestra señora de los Dolores, colocada en el nicho, y a san Martin de Porres colocado en un pedestal. Estos santos son los copatronos de nuestra Parroquia.
En la parte exterior del templo, en la fachada principal hay cinco imágenes. En la hornacina central del frontispicio tenemos a nuestra Señora de Fátima, imagen de cantera blanca, y mide 3, 65 mts.; fue bendecida por Don Fernando Chávez.
LOS ATRIOS
Un atrio es un espacio situado a la entrada del templo.